Simplificar, homologar y automatizar procesos, permitirá impulsar el comercio exterior
Después de la entrada en vigor del programa de Ventanilla Única el pasado 16 de enero, cuyo propósito es facilitar a los empresarios mexicanos la realización de trámites de comercio exterior vía electrónica, diversos han sido los resultados obtenidos.
Sobre todo, aquellos relacionados con la reingeniería de un sistema único de servicios de gobierno, uso de menores datos y documentación, así como mayor transparencia.
“Es importante considerar la manera en que esta nueva práctica de hacer comercio exterior beneficia al país en términos de atracción de inversión extranjera. Si bien se han presentado algunos retos en la adopción de Ventanilla Única por parte de los operadores en México, es cierto que el uso y envío de información electrónica ubica al país en una posición clave al momento de realizar negocios internacionales”, indicó Cecilia Montaño, Socia Líder de Comercio Exterior y Aduanas de Deloitte México.
De acuerdo con datos de la Administración General de Aduanas, dada su vocación de comercio exterior, actualmente en México se tramitan más 37 mil permisos de exportación, más de un millón de permisos de importación y más de 10 millones de pedimentos; de igual forma, se hace uso de un volumen anual aproximado de papel equivalente a 27 mil árboles.
En comparación con otros países, la implementación de Ventanilla Única en México se caracteriza por ser un proyecto sustentado en la reingeniería de procesos y trámites. A través de un solo esquema, el gobierno mexicano está concentrando la operación de procesos de nueve dependencias, lo que permite uniformar funciones y resoluciones.
