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Selección de proveedores en la emergencia sanitaria

Rosa María Eseverri, directora de Marketing de Dickies México

Nueves meses pasaron desde que la covid-19 se clasificó como pandemia mundial, y en la actualidad no existe un organismo o institución que pueda pronosticar una fecha para el final de la “cuarentena extendida”. Lo que es un hecho es que aún después de que se distribuya la vacuna y recuperemos nuestras rutinas anteriores, la propagación del virus dejará fuertes reveses en la economía del mundo. 

Por ello, las empresas no deben dar nada por sentado, ya que los meses venideros serán vitales para demostrar su instinto de supervivencia a los cambios. Esto aplica en particular a las compañías que sustentan su negocio en numerosas relaciones comerciales con proveedores. 

Ante este panorama surge una pregunta: ¿cómo se elige un buen proveedor en un entorno en el que la covid-19 domina la mayoría de los aspectos de los negocios? Sin duda, la primera señal de un potencial candidato confiable es que tenga la suficiente flexibilidad para adaptarse de forma eficiente y rentable a las circunstancias que cambian rápidamente.

Posteriormente, un diagnóstico profundo determinará si el aspirante dispone de las herramientas, el personal, los procesos y la visión para mejorar la productividad del demandante.

Asimismo, el socio comercial debiera demostrar una disposición férrea a impulsar el beneficio mutuo y lograr objetivos de mejora continua en paralelo; en tiempos de crisis, las empresas aprenden una de otra y también se cuidan las espaldas.  

Por otro lado, si algo demostró la pandemia es la importancia de la digitalización: hay que tenerla en cuenta a la hora de la selección. Aunque buscar información en internet no sustituye una evaluación presencial, sí ofrece un panorama previo del prestigio y la calidad del proveedor, incluso antes de que presente sus servicios a una empresa. Lo anterior es un primer filtro que permite agilizar el protocolo de elección.

Desde nuestra experiencia en Dickies como proveedores de ropa de trabajo para distintos sectores, creemos que la mejor carta de presentación es la transparencia tanto digital como física. Por eso, al conversar por primera vez con un potencial cliente, este tiene la oportunidad de probar las prendas sin compromiso, con lo que le demostramos sus múltiples funciones y su estupenda relación costo-beneficio.  

Ya que la pandemia orilló a las empresas a cuidar su inversión, algunas se encontrarán inseguras antes de cerrar un trato, por lo tanto la credibilidad es importante desde el primer contacto. De nuevo, si un virtual proveedor demuestra las ventajas económicas a mediano y largo plazo, con soluciones realistas y confiables, esto le sumará puntos como una organización fidedigna. 

No obstante, las evaluaciones no terminan después de la aprobación inicial: son un proceso continuo para asegurar que se sigan cumpliendo los altos estándares establecidos, necesarios para proteger la salud de los negocios. La mayoría de las empresas querrán que una relación duradera con socios estratégicos siga, incluso si la pandemia concluye

Editorial

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