Leopoldo Ruiz es director Regional para Axis en Latinoamérica. Hoy escribe para Retailers.mx sobre cómo la videovigilancia se convirtió en más que una estrategia de seguridad para el retail. Hoy, de cara a la emergencia sanitaria, es prioritaria para garantizar los protocolos sanitarios tanto para empleados como para los consumidores.
Nos encontramos frente a una economía de mercado globalizada, que hace responder a todos los países a un modelo de negocio que se ha visto fuertemente afectado por la emergencia sanitaria. Ante este nuevo escenario, surgen cuestiones que deben replantearse; quizá es momento de reflexionar ante un cambio de planes y estrategias de seguridad que busquen el equilibrio entre la salud y el rendimiento de los negocios, por lo que será necesario que los retailers respondan ante los protocolos de seguridad sanitaria.
Hoy, más que nunca, podemos ver la importancia de desarrollar estrategias para la prevención de riesgos laborales, en este sentido, resulta fundamental tomar en cuenta cómo la videovigilancia se ha posicionado como un nuevo paradigma para el comercio minorista, no sólo para la mitigación de actos delictivos o para optimizar las tiendas mediante el análisis inteligente, sino también para garantizar el retorno seguro de los trabajadores a los puntos de venta.
Considerando la relevancia que tiene la seguridad sanitaria, la tecnología es pieza medular para realizar protocolos de seguridad, con el objetivo de aminorar los contagios.
Nuevas tendencias de seguridad
El garantizar un entorno seguro pone de manifiesto la convergencia que debe existir entre la tecnología y los procesos de seguridad. En América Latina ya se han aprobado protocolos como el de bioseguridad que buscan hacer frente a los riesgos sanitarios. Entre las normas que se establecen se encuentra el hecho de eliminar controles de acceso biométricos, además de llevar a cabo un lavado de manos constante y eficiente.
Lo que se garantiza con estos métodos es que el regreso a la nueva normalidad sea con base en tres características: gradual, ordenado y cauto, los cuales son esenciales para alcanzar las medidas de seguridad correctas con el fin de evitar la propagación de enfermedades.
Sabemos que en un centro comercial a diario ingresan trabajadores y proveedores, es por ello que los controles de acceso que permiten la entrada mediante el reconocimiento facial o a través de la lectura de códigos QR, se están posicionando como una tendencia que está marcando un precedente en los comercios minoristas, pues les han brindado la garantía de abrir las puertas únicamente a las personas permitidas minimizando el riesgo de contagio.
Uno de los retos más importantes para los comercios es garantizar la higiene de los trabajadores, con el fin de asegurar un servicio responsable para los clientes. Hoy la videovigilancia ha demostrado la posibilidad de controlar el lavado de manos. Esto lo hace mediante el monitoreo de las personas que permanecen en un establecimiento: el análisis inteligente ayuda a identificar quiénes han cumplido el protocolo de sanidad y de no haberlo llevado a cabo, envía una señal de alerta para invitar a su cumplimiento.
Repensar la seguridad e invertir en tecnología será la piedra angular de las estrategias de seguridad para los retailers en el nuevo normal, ya que la salud de los empleados y continuidad de los negocios serán dos prioridades para los minoristas durante esta coyuntura, y la apuesta por esta evolución tecnológica permitirá que el sector siga creciendo.
Impulsar la innovación no es una tarea sencilla, sin embargo, hoy más que nunca nos enfrentamos a un mundo en el que las necesidades se encuentran cambiando, y la industria de videovigilancia está asumiendo los retos para ayudar a los retailers a estar preparados para afrontar los desafíos de seguridad.
