La última milla como ejemplo de la economía colaborativa
Albert GO, Manager Regional LATAM en Lalamove.
Albert GO, Manager Regional LATAM en Lalamove.
Una de las lecciones más importantes que nos ha dejado la pandemia es que debemos poner más atención por el bien común de las personas y utilizar las nuevas herramientas tecnológicas en pro de nuestros bienes y convertirlos en servicios que aumenten nuestros ingresos.
En un corto tiempo de apenas dos años, el avance intempestivo de la irrupción digital provocó un mundo hiperconectado cuyos efectos más destacables son las mayores facilidades para comprar, vender y entregar pedidos a través aplicaciones online. Con ello, el modelo de economía colaborativa ha tomado fuerza y se ha convertido en una manera muy efectiva para emprender de manera más sencilla.
Las nuevas tecnologías y los hábitos de consumo cambiaron las relaciones comerciales, abriendo más oportunidades de poner nuestros propios activos (medio de transporte, casa, etc.) a disposición de otras personas en beneficio de ambas partes. Este es el principio que constituye a la economía colaborativa. En México, este esquema gana cada día más consumidores, y es por ello que te explicaré más sobre ella, sus características, beneficios y principales retos.
La economía colaborativa se define como un conjunto de actividades económicas realizadas a través de una plataforma tecnológica que permite un intercambio directo de bienes y servicios entre dos particulares, en palabras más simples, hablamos de un esquema comercial en el que se presta, alquila, intercambia, vende o compran productos y servicios de acuerdo con las necesidades específicas y la colaboración entre las personas.
Si bien el concepto no es nuevo, podemos decir que la tecnología es su principal catalizador. De acuerdo con un estudio de la consultora PwC, esta logró ingresos de 15 000 millones de dólares en 2014 a nivel global y estiman que para el 2025 llegaría a los 335 000 millones de dólares. Esto llevaría al modelo colaborativo a compartir el 50% del mercado con el esquema tradicional.
Conocida también como economía compartida, este término abarca diversos sistemas entre los que destacamos:
- Consumo colaborativo
- Crowdfunding
- Freelancing
- Coworking
- Alojamiento particular
- Logística de última milla
Aunque, de primera instancia, este modelo representa disminución de tiempo, ahorro de gastos y trámites más directos, existen otras ventajas que se pueden nombrar de la economía colaborativa, por ejemplo:
Flexibilidad de horarios y mejor manejo de tiempo. Una de las cosas que puedes apreciar al usar o trabajar en la economía compartida es la flexibilidad. En el caso de los repartidores por aplicación, una persona puede hacer entregas de pedidos en su tiempo libre para ganar un ingreso extra.
Eficiencia de recursos. La economía colaborativa te permite ganar dinero alquilando bienes poco utilizados. Por ejemplo, rentar una casa o un cuarto con una app o activar un medio de transporte que tienes estacionado (moto, coche o camioneta) para hacer entregas, convirtiendo un activo que estaba detenido en una fuente de autoempleo.
Beneficios económicos. La ventaja más obvia de la economía colaborativa son las ganancias financieras que te permite y los ahorros que te ofrece. Considera que por un lado están los conductores de aplicaciones, que se benefician de la plataforma que creó la empresa para la logística del transporte, mientras ganan dinero por prestar un servicio; por otro, están los consumidores que ganan tiempo y restan esfuerzos al conseguir un medio de transporte seguro.
Mayor conexión: Al tener una relación más directa entre un cliente y un prestador de servicio ayuda a conectar a las personas más rápido y sin intermediarios, mejorando la confianza interpersonal.
Formaliza la economía informal y promueve el emprendimiento: la digitalización de transacciones en plataformas colaborativas permite formalizar las actividades esporádicas.
El futuro del esquema colaborativo es prometedor, y es un hecho que va a quedarse con nosotros. Si bien funcionan como complementos para grandes industrias, como forma de emprendimiento, también representa una fórmula exitosa, ejemplo de ello es la última milla, que se ha establecido como un servicio eficiente, trazable, seguro y cómodo tanto para empresas como para consumidores.