Cuando las cosas son lo más sencillo posible, la disminución de los costos es una consecuencia lógica al hablar de cualquier industria. Con esto, no se trata de omitir etapas o suprimir fases, sino de establecer parámetros y ver cómo se pueden simplificar para reducir consumos, ampliar alcances, extender capacidades o recursos.
Para identificar dónde se pueden mejorar distintos procesos, la información y el conocimiento son indispensables. Tomar decisiones basadas en situaciones o elementos de los que no se tienen los detalles (o incluso dejar de tomarlas) puede tener efectos negativos en nuestra industria o generar retrasos y estancamiento en el crecimiento del negocio.
En el retail, todos los días encontramos innovaciones, nuevas tecnologías y formas ingeniosas para hacer de la experiencia del cliente algo agradable y ello contribuya con los objetivos de venta de la cadena o establecimiento. Ejemplos hay muchos, como las cajas de autocobro o códigos QR en algunos productos.
A ello podemos sumar que, de acuerdo con EY, los clientes están preocupados por el medio ambiente y toman decisiones basadas en el impacto de lo que compran y dónde lo hacen. El 90 % de los consumidores mexicanos usan bolsas reutilizables para realizar sus compras y 36 % se aleja de las marcas o establecimientos que no realizan ninguna contribución al medioambiente.
Si volteamos a ver cuestiones más de tinte operativo, podremos notar que la limpieza de las instalaciones, el cuidado de los productos, la protección de la inocuidad y el ahorro de recursos como el agua, también tienen un alto grado de innovación e implican tecnologías de vanguardia que a veces no están en el imaginario colectivo.
Un programa para ayudar a garantizar la limpieza profunda simplifica enormemente el proceso y, a la vez, ofrece ahorros que se reflejen en sus ganancias mediante un uso reducido de la mano de obra y menor consumo de agua y energía.
Es posible lograr un crecimiento rentable al tiempo que se protege la marca a través de mayor compromiso con la sustentabilidad, una mejor calidad alimenticia, una experiencia de compra superior y rendimiento operativo, mientras que también se disminuyen las pérdidas por faltante de mercancía y se minimiza el riesgo de sufrir incumplimientos.
Todo eso se pude lograr al seguir estos puntos:
- Ten amplio conocimiento de la industria;
- Utiliza productos innovadores, soluciones digitales y servicios;
- Adquiere conocimientos a la hora de auditar que identifican riesgos e implementan acciones correctivas;
- Cuenta con un equipo nacional de campo de profesionales CP-FS de seguridad alimentaria; y
- Acércate con un aliado de RD&E especializado en comercios minoristas, especialistas en seguridad alimentaria y cuentas técnicas.
Si lo analizamos detenidamente, podremos notar que, aunque varía de tienda a tienda, se pueden reducir tiempos de limpieza a la mitad, mejorar drásticamente el consumo de agua y energía, y elevar los niveles de inocuidad y desinfección, lo que desembocará en mayor eficiencia y rentabilidad.
Colaboración para Retailers.mx
por Juan Carlos Leyva, líder de la División de Restaurantes de Comida Rápida de Ecolab Latinoamérica Norte.
La limpieza y desinfección en los departamentos de frutas y verduras