NRF: «La recesión en EEUU es poco probable y habrá crecimiento en 2023»

Es poco probable que se produzca una recesión y se espera que la economía experimente un ligero crecimiento en 2023 a medida que los consumidores sigan lidiando con la inflación y las altas tasas de interés.

Así lo señaló Jack Kleinhenz, economista jefe de la National Retail Federation (NRF), quien explicó que “luego del primer mes de 2023, la economía (en Estados Unidos) enfrenta fuertes vientos en contra y, con la excepción de una inflación más baja, probablemente enfrentará más desafíos antes de que mejore”.

“El debate sobre si estamos en recesión se intensificará en los próximos meses, como ocurrió el año pasado. Pero si bien los hogares probablemente sentirán condiciones similares a las de una recesión este año, no espero que esta sea lo suficientemente grave como para convertirse en una recesión oficial”, señaló.

Por su parte, la National Bureau of Economic Research se negó a declarar una recesión oficial porque la caída en la primera mitad del año afectó solo a ciertos sectores de la economía y no a todos.

Informó que luego de dos trimestres consecutivos de números negativos en la primera mitad de 2022, el PIB creció 3.2% en el tercer trimestre. El crecimiento se desaceleró a 2.9% en el cuarto trimestre, pero al cierre del año llegó a 2.1% por encima de 2021.

Jack Kleinhez aseguró que “la buena noticia es que los balances de las empresas y los hogares están en la mejor forma que hemos visto antes de una recesión. Esto debería hacer que cualquier desaceleración económica sea leve y limitar los riesgos a la baja, a pesar de mi perspectiva de que la economía se sitúe en un camino de crecimiento cero durante 2023″.

Dijo que “la economía experimente un ritmo de crecimiento lento o se encuentre en una ‘caída considerable’ depende en gran medida de si la Reserva Federal (FED) puede lograr el equilibrio adecuado entre las tasas de interés y la inflación. Si bien el impulso de desaceleración de esta última podría allanar el camino para la reevaluación de futuros aumentos de tasas o incluso una reducción, es probable que estas permanezcan ‘en territorio restrictivo’ durante el resto del año”.

Por otra parte, la NRF indicó que el gasto del consumidor creció 2.8 % en 2022; se estaba desacelerando a finales, cayendo 0.2 % en noviembre y otro 0.3 % en diciembre. Las ventas minoristas totales cayeron 1.1% mensual en el último mes del año, debido a que los precios de la gasolina y las ventas de automóviles se redujeron drásticamente y las ventas navideñas resultaron ser irregulares.

Las ventas minoristas definidas por NRF (excluidos los concesionarios de automóviles, las gasolineras y los restaurantes para centrarse en el comercio minorista) cayeron 0.5 % en diciembre. Las ventas navideñas combinadas de noviembre a diciembre aumentaron 5.3 % en comparación con 2021, pero fueron más lentas de lo esperado.

El Índice de Gastos de Consumo Personal (PCE por sus siglas en inglés), la medida de inflación preferida por la FED, disminuyó al 5% en diciembre, su ritmo anual más lento en más de un año. Eso fue inferior al 5.5% de noviembre y el PCE subyacente, que excluye los precios volátiles de los alimentos y la energía, estaba en el 4.4%. Tras esos resultados, la FED aumentó las tasas de interés en solo un cuarto de punto porcentual en su reunión de febrero, en lugar de repetir el aumento de medio punto impuesto en diciembre.

Cabe mencionar que las declaraciones de Jack Kleinhenz se publicaron en la edición de febrero de Monthly Economic Review de NRF, donde concluyó que “la economía es más resistente de lo esperado, sin embargo, muestra una leve desaceleración a medida que los aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal adoptados para controlar la inflación están teniendo el efecto deseado».

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